El Roble Eyre Miel ofrece un acabado en tonos dorados y cálidos, inspirado en la madera natural de roble. Su diseño realza la veta con un aspecto acogedor y atemporal, aportando luminosidad y sensación de confort a cualquier estancia. Este suelo laminado combina durabilidad, estética y fácil mantenimiento, siendo perfecto para crear espacios hogareños, equilibrados y llenos de calidez.